Excursión a Sokuluk

Excursión a Sokuluk, Kirguizstán

Preparé mi mochila para dormir una noche en las gargantas de Sokuluk. Dentro puse la tienda, el saco de dormir y el aislante. La forma más económica de viajar desde Bishkek a Sokuluk es con marshrutka, una mini van que puede ser cómoda si vas sentado. Si mides más de un metro y ochenta centímetros, irás encogido si te toca ir de pie. Sokuluk es un pueblo situado a unos 30 kilómetros de la estación de buses del mercado de Ortosay, y el trayecto dura unos tres cuartos de hora.

Viajando en marshrutka, desde Bishkek a Sokuluk

 

Viajando en marshrutka

Me había propuesto llegar a la cascada de Belogorka, al final de la ruta del cañón. Sin embargo, el viaje no sería tan rápido como ir desde Bishkek al publo de Sokuluk. Ahora tocaba hacer el resto del trayecto combinando taxi, autostop y andar. Sobre todo andar.

En Sokuluk estuve esperando un rato al marshrutka para llegar a Belogorka, la última población, a unos 15 km de la cascada que lleva el mismo nombre. Hablando con otras personas que también esperaban, supuse que el transporte podría tardar mucho en llegar. No quería hacer la travesía de noche porque quería disfrutar de los colores de la puesta de sol, así que decidí tomar un taxi que me cobraría unos 10.000 som (unos 10 euros). Era algo “caro”, pero el taxista debería hacer el viaje de regreso a Sokuluk sin clientes, probablemente.

El viaje en taxi fue entretenido. El simpático taxista tenía curiosidad por mi visita. Ambos nos esforzamos por comunicarnos utilizando el ruso, el inglés, el catalán y el lenguaje universal de la mímica.

Tras transitar por una carretera estropeada, el asfalto se acabó. Era el fin de trayecto. Un coche se detiene a nuestro lado. El conductor le pregunta al taxista si soy un turista y hacia dónde me dirijo. Enseguida fui invitado como pasajero y continuar por la pista de tierra durante varios kilómetros, hasta llegar a la casa de la amable pareja. Allí me despido de ellos y sigo mi camino a pie.


La movilización. Expatriados a la fuerza

Después de un rato caminando, otro coche pasa por mi lado y se detiene. Los ocupantes eran dos hombres y una mujer. Me preguntan por la cascada de Belogorka y les digo que voy hacia allí con la intención de visitarla por primera vez. Me ofrecen ir todos juntos en el coche. Parecen simpáticos. Me siento detrás con Sasha, el amigo de la pareja. Los tres son rusos. La pareja vive en Sokuluk desde hace unos años, mientras que Sasha abandonó Moscú hace dos semanas para evitar que el gobierno ruso le enviara a la guerra. Se lamenta de que por primera vez no celebrará el cumpleaños con su esposa y su hija, que se han quedado en Moscú. Hacía pocos días que había sido el cumpleaños de su mujer y tuvo que felicitarla en la distancia. Una situación muy dura que está viviendo la población rusa desde que estalló la guerra con Ucrania. Desde entonces he conocido a muchas personas que han tenido que abandonar a sus familias, sobre todo hombres, para refugiarse en otros países como Kirguistán.

Amb en Sasha i la parella d'amics que viu a Sokuluk
Junto a Sasha y la pareja de amigos que vive en Sokuluk

 

Por el camino nos detenemos para estirar las piernas y caminar a orillas del río. Abren el maletero y sacan algo de comida que comparten conmigo. Un hombre pasa con su coche y pregunta si todo va bien. La conversación transita en ruso y no entiendo todo lo que dicen. Al parecer no hay agua en la cascada. Claro, estamos en el mes de octubre y está haciendo buen tiempo. Todavía no ha llovido ni nevado. Para disfrutar de la exuberancia de la cascada de Belogorka tendré que volver en primavera.

Mis amigos deciden volver hacia Sokuluk. Yo, les digo que sigo a pie hasta encontrar un sitio para plantar la tienda y pasar la noche. Ha sido un verdadero placer compartir este rato con ellos. Viajar es apasionante y no se me ocurre una mejor manera de obtener experiencias y conocer a personas de diferentes culturas.

 

Un lugar tranquilo para disfrutar

Está oscureciendo y me apresuro a encontrar un lugar para plantar la tienda. El sitio es magnífico. Me he alejado de la pista y he bajado unos metros por la montaña hacia el río. Disfruto del susurro del río y la paz del entorno. Hoy dormiré tranquilo.

M'espera ujn
Me espera una gran jornada fotográfica

 

Despertant en un lloc meravellós
Despertando en un lugar maravilloso

 

Por la mañana me levanto temprano, recojo el campamento y hago todo el camino de regreso a Sokuluk prácticamente andando. Disfruto de la luz temprana y del espectáculo de colores de este magnífico recorrido.

Si viajas a Kirguizstán, no te olvides de visitar Sokuluk y las cataratas de Belogorka, sobre todo en primavera. Está muy cerca de Bishkek, y es una buena opción como primera excursión para empezar a adentrarse en la cultura rural del país.

Canyó de Sokuluk
Cañón de Sokuluk

 

Colors de tardor a Sokuluk
Colores de otoño en Sokuluk

 

La vall de Sokuluk
El valle de Sokuluk

 

** Encuentra fotos de Sokuluk disponibles en el catálogo, aquí.

 

Añadir nuevo comentario

Este sitio web está protegido por reCAPTCHA y la Política de Privacidad de Google y la aplicación de los Términos de Servicio. *